dissabte, 27 d’octubre del 2012

Analizarán el ADN de doce cuerpos hallados en ataúdes en la fosa común donde se busca a José Celda

http://www.europapress.es/comunitat-valenciana/noticia-analizaran-adn-doce-cuerpos-hallados-ataudes-fosa-comun-donde-busca-jose-celda-20121026153334.html


OTRAS CUATRO FAMILIAS RECLAMARÁN LOS RESTOS DE SUS ANTEPASADOS


Busqueda De José Celda En Fosa De Paterna, Exhumación  (Valencia)
Foto: PICASA /GRMH

Todos con su botella, una conserva un papel con el nombre de Ramón Gandía Belda y la fecha, que confirma que es la fosa de Celda

   VALENCIA, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -
   La lucha de Josefa Celda por identificar los restos de su padre fusilado en el Paredón de Paterna el 14 de septiembre de 1940 para poder enterrarlo con su madre han comenzado a dar sus frutos. La exhumación de la fosa común donde siempre ha sostenido que está su padre, ha revelado la existencia de otros doce cuerpos todos ellos en ataúdes y con una botella en la que supuestamente guardaban un papel con su nombre, del mismo modo que lograron enterrar a José Celda, gracias a un propina que su hermana pagó al enterrador.
   Precisamente, una de estas botellas todavía conservaba restos de papel en su interior, y tras un estudio de recuperación se ha encontrado el nombre deRamón Gandía Belda, también vecino de Massamagrell al igual que Celda, y la fecha de fusilamiento, cosa que ha confirmado que se trata de la fosa que buscaban.
   Así lo ha anunciado este viernes el coordinador del Grupo para la Recuperación de la Memoria Histórica (GRMH), Matías Alonso, que ha ofrecido una rueda de prensa en el cementerio de Paterna junto a Josefa Celda, y algunos familiares de los otros cuerpos hallados. A todos ellos se les van a hacer pruebas de ADN y si se certifica su identidad, cuatro familias más también llevarán los restos de sus antepasados. Los que no se reclamen volverán a ser enterrados donde estaban.
   Josefa Celda ha confiado en que "para Navidad" puedan estar los resultados de ADN y se ha mostrado "muy contenta" de que el trabajo que ella inició "pueda facilitar" que otras personas también encuentren a sus familiares. Cuatro años después, en los que le han puesto "mil pegas" por el camino, Josefa se encuentra "cansada", con "ganas de zanjar" y quedarse "tranquila".
   Su único deseo es que llegue el momento de dar a su padre un "entierro digno, como él se merece, en el pueblo y en compañía de mi madre", ha manifestado.
   Según Matías Alonso, este "puede ser el último grupo de familias valencianas que puedan recuperar sus restos", debido al cambio de política en relación a la Memoria Histórica, ha alertado. Primero con la rebaja de subvenciones destinadas a estas investigaciones, de 6,5 a 2,5 millones de euros, y segundo porque estos últimos "ni siquiera aparecen en los Presupuestos Generales del Estado para 2013", ha lamentado.
   El hallazgo de los doce cuerpos en ataúdes y con sus respectivas botellas que contenían un papel, aunque en casi todos ilegible, indica que sus familiares tenían la "esperanza de que algún día podrían volver a por ellos". Por ello, estos vecinos de Massamagrell, debieron pagar al enterrador para permitirles introducir la botella que después podría identificarles.
   De ellas, los trabajos de recuperación han logrado rescatar uno de los papeles con la fecha de fusilamiento, 14 de septiembre de 1940, y el nombre de Ramón Gandía Belda, de 23 años, casado y con dos hijos. Este hallazgo es lo que les ha dado la "certeza" de que se encuentran en la fosa correcta, ha celebrado Alonso.
"MÁS FAMILIAS PODRÁN CERRAR SU HERIDA"
   Además, ahora hay otras cuatro familias que van a aprovechar la apertura de la fosa y las pruebas de ADN para llevarse también a sus familiares si se confirma que están aquí. Algunas más se lo están pensando.
   En este sentido, el coordinador del GRMH ha expresado su "satisfacción" por la "utilidad pública" que está teniendo la "lucha tenaz" que emprendió Josefa en solitario y que ahora cuenta con nuevos apoyos. "Más familias podrán cerrar su herida", ha celebrado.
   Tras este hallazgo, finaliza la exhumación, se cierra la fosa y comienza el análisis en laboratorio con la fase de bioantroprometría en laboratorio y las pruebas de ADN, que es espera que puedan obtener resultados en unos dos o tres meses.
   Hasta ahora, los trabajos en la fosa se han llevado a cabo a una altura de entre 2,10 y 2,15 metros de profundidad. Por debajo ha aparecido suelo de cal, "que evidencia la fosa es más grande y que sigue habiendo más restos, pero sin ataúd", ha concluido Alonso.